lunes, 21 de mayo de 2007

Saturain y la experiencia, o lo que hacemos con ella

En la Contratapa de Página de hoy, Sasturain (a esta altura ya un líder espiritual de esta búsqueda), cita a Borges, que cita a Lin Yutang. Y Lin Yutang, que es un Otro en Buenos Aires, recuerda como una Experiencia Memorable (así, con mayúsculas) la visita a un bodegón de La Boca; una experiencia, según Sasturain, berreta si las hay. Pero Lin Yutang la recuerda con pasión, los detalles se amplifican en su memoria y convierte esta anécdota en un momento especial, único para él, individuo (y qué es, si no la experiencia) y para quienes lo acompañaron.

Hace un tiempo, en esta fábrica de momentos especiales en la que trabajo, me preguntaron qué lugar de los que había visitado me había gustado más. Es una pregunta tonta y difícil a la vez, y mi respuesta fue un poco las dos cosas: Bélgica, contesté.

En Bélgica dormí en el mejor hotel en el que había dormido nunca, comí las comidas más ricas y tomé las cervezas más raras. Vi paisajes hermosos, pero eso puede ser en casi todas partes. Tuve las mejores conversaciones y hermosa compañía. Me mimaron y llevaron a todas partes. Y me sentí querida como en pocas partes del viaje.

Esas cosas hacen a mi recuerdo. Y a mi visita a un puebluchito de casas de piedra, perdido en una ruta, un recuerdo especial.